Cama con somier extensible: PASO A PASO + OPCIONES

¿Estás camperizando tu furgoneta y ya estás cansado de simplemente echar una colchoneta al suelo para dormir? ¿Quieres subir de nivel y estás pensando en poner una cama, pero no te decides por qué tipo de cama elegir?

Una muy buena opción es una cama de somier extensible, barata, versátil y además, ¡te la puedes hacer tu mismo!

Sigue leyendo y te lo contamos todo acerca de esta solución. Primero te explicaremos los pasos básicos para que puedas construir tú mismo tu somier de una manera fácil y sencilla.

A continuación, te daremos algunas alternativas y consejos para que te hagas una idea de la gran variedad de opciones que existe, y así puedas elegir la combinación que más te guste.

Construcción de una cama de somier extensible paso a paso

Hay cientos de formas de hacer tu cama extensible y todas ellas son buenas. A continuación te explicaremos una forma sencilla, pero con unos pequeños detalles que harán que funcione a la perfección, para que entiendas la base de la construcción de un somier extensible.

Más adelante, te daremos ideas de materiales alternativos, diferentes posibilidades para los apoyos y algunas opciones adicionales, para que tú elijas qué es lo que mejor se adapta a ti y a tu furgo.

Al final la cuestión será cuánto nos queremos “empantanar”, de qué medios disponemos, cuánto tiempo queremos dedicarle al proyecto, y el presupuesto que tengamos, entre otros factores.

1.      Entender las partes del somier extensible

El mecanismo del somier extensible es muy sencillo. Consiste en una serie de lamas entrecruzadas, donde la mitad de ellas forman parte de una estructura fija, y la otra mitad se abren o se cierran con una estructura móvil.

Habrá que tener cuidado con los siguientes puntos:

  • Las medidas para que ambas partes encajen bien
  • Las piezas tendrán que tener algo de holgura para que abrir y cerrar la cama sea fácil

2.      Calcular las medidas generales

Lo primero que tendremos que hacer será medir bien la furgoneta y decidir las 4 medidas principales:

  • el largo (L)
  • el ancho cuando la cama está abierta (A)
  • el ancho cuando la cama está cerrada (C)
  • la altura (H)

Ten en cuenta que el ancho de la cama cuando está abierta (A) será el doble del ancho cuando está cerrada (C) menos 4 veces el ancho de los listones de la estructura (E). O lo que es lo mismo, si hemos calculado cuánto queremos que la cama mida abierta (A), podemos calcular que la cama medirá cerrada (C) la mitad de A más 2 veces E.

3.      Calcular el número de lamas

Para calcular el número de lamas y que nos cuadre todo bien, empezaremos tomando el largo (L) que hemos decidido anteriormente, y decidiremos el ancho de cada lama.

Si ya tienes las tablas de madera que vayas a usar para las lamas, simplemente mide el ancho. En caso de que vayas a comprar la madera, o que tengas un tablero grande que vayas a cortar tú mismo, te recomendamos que  las lamas tengan aproximadamente 2 cm de espesor, y entre 5 y 10 cm de ancho.

Estas medidas son solo orientativas, así que puedes adaptarlas a lo que te venga mejor, simplemente piensa que cuanto más estrechas sean, más lamas necesitarás, y que deben ser de suficiente espesor para que la cama sea resistente, especialmente cuando esté abierta.

Recuerda que las lamas serán fijas o móviles de manera alterna, y que queremos que las lamas de los extremos sean móviles. Además, dejaremos un pequeño hueco entre las lamas para asegurarnos de que nos resulte fácil abrir y cerrar la cama.

Utilizando una fórmula

Si quisieras calcular el número de lamas al milímetro, habría que decidir la medida del hueco, que suele estar entre 3 mm y 3 cm, y calcular el número de lamas usando la siguiente fórmula:

L + Hueco = (A.L. + Hueco) x nº de lamas

Pon todas las medidas en cm para que te salgan bien los números

Por ejemplo, si decidimos un hueco de 1 cm, nuestro largo es 1.85 m, y nuestro ancho de lama 5 cm, tendríamos:

nº de lamas = (L + Hueco) / (A.L. + Hueco) = (185 + 1) / (5+1) = 186 / 6 = 31

En el caso de que el número que hayamos obtenido sea par, o nos salga con decimales, podemos probar con un hueco diferente, o podemos redondear el número de lamas al número impar anterior.

Recuerda que queremos un número de lamas total impar para poder tener las dos lamas de los extremos móviles.

nº de lamas = (L + Hueco) / (A.L. + Hueco) = (191 + 1) / (5+1) = 192 / 6 = 32 -> redondeamos a 31

nº de lamas = (L + Hueco) / (A.L. + Hueco) = (184 + 1) / (5+1) = 185 / 6 = 30.8 -> redondeamos a 29

A continación, tendremos que recalcular el hueco:

Hueco = [L – (A.L. x nº de lamas)] / (nº de lamas -1) = [191 – (5 x 31)] / (31 – 1) = 36 / 30 = 1.2 cm

Hueco = [L – (A.L. x nº de lamas)] / (nº de lamas -1)= [184 – (5 x 29)] / (29 – 1) = 39 / 28 = 1.39 cm

El método fácil

Sin embargo, te proponemos un sistema mucho más fácil, sin necesidad de hacer tantos números, que además te ayudará a construir el somier más rápido que midiendo cada uno de los huecos.

Vamos a utilizar el espesor de la lama como medida para el hueco entre lamas. A la hora de construirlo simplemente tendremos que colocar una tabla en vertical para saber cuanto espacio dejar, sin necesidad de medir cada vez.

De esta manera, es poco probable que nos encajen las medidas del ancho de lama y los huecos exactamente con el largo que queríamos para nuestra cama. Tenemos dos opciones: adaptar el largo (L) unos milímetros en el caso de que tengamos margen, o bien ajustar ligeramente los últimos huecos a la hora de construir la cama.

Por lo tanto, medimos el espesor de la lama, que será el hueco, calculamos el número de lamas y redondeamos ese número para que sea impar:

nº de lamas = (L + Hueco) / (A.L. + Hueco)

Por ejemplo, si vamos a utilizar tablas de 19 mm de espesor, 9 cm de ancho, y tenemos espacio en la furgo para una cama de 1.82 m de largo:

nº de lamas = (L + Hueco) / (A.L. + Hueco) = (182 + 1.9) / (9 + 1.9) = 183.9 / 10.9 = 16.87

Vamos muy justos de espacio, y no nos cabe una cama de 183.4 cm (que sería lo ideal para 17 lamas de 9 cm con 1.9 cm de hueco). Solo tenemos 182 cm, por lo que vamos a redondear a 17 lamas, y luego simplemente ajustaremos los últimos huecos haciéndolos unos milímetros más pequeños.

4.      Preparar las piezas y otros materiales

Lo primero antes de empezar es disponer de las herramientas que vamos a necesitar:

  • Metro o cinta métrica
  • Sierra de calar (en el caso de que la madera no venga ya cortada a medida)
  • Lijadora de banda. Si no disponemos de ella podemos usar una radial con disco de lija, una lijadora eléctrica convencional o en el caso más laborioso papel de lija
  • Taladro y brocas para madera.
  • Destornilladores. Mejor eléctrico con cabezales intercambiables.

Con respecto a los materiales necesarios, ten en cuenta que variarán según las medidas de tu cama, así que simplemente tienes que adaptarlos a tu situación específica. Aquí te dejamos una lista de las piezas de madera que hacen falta para nuestro somier extensible:

  • Lamas de madera: en la versión básica del somier, todas las lamas deberían ser del mismo tamaño.

Ten en cuenta que en los dibujos explicativos hay muy pocas lamas; esto es para que sea más sencillo de visualizar y de entender, pero lo habitual será que tu cama tenga bastantes más.

  • Listones largos: 2 listones para la estructura de lamas fijas y 2 para la de lamas móviles. Uno de los listones móviles será algo más corto.

  • Listones cortos: servirán tanto para completar el marco de la estructura, como para las patas. Tenemos 2 listones para la estructura, y 8 para las patas.

Para preparar las piezas, corta todas a la medida correspondiente y asegúrate de lijarlas bien antes de empezar a construir tu somier.

Además de las piezas de madera, también te hará falta lo siguiente:

  • Tornillos y arandelas
  • Escuadras
  • Cinta de carrocero
  • Cola

5.      Construir la base con los apoyos de la parte fija

En 3 sencillos pasos tendremos listo el marco estructural que servirá como base para la parte fija.

Comenzaremos fijando uno de los listones largos a dos de las patas, una en cada extremo, con tornillos de rosca madera, no sin antes darle cola para reforzar la unión y que no se mueva o haga ruido.

Fijaremos la base a la furgoneta mediante el uso de escuadras. ¡Ojo, cuidado de elegir los tornillos del tamaño correcto para evitar llegar a la chapa!

A continuación, encolamos y atornillamos otro listón largo a tres patas, una en cada extremo y una tercera en el medio, fijándolo a la furgoneta en la posición adecuada.

Por último, colocamos los listones cortos para unir ambas partes de la estructura. Estos van encolados y atornillados por debajo de los listones largos, como indica el dibujo.

6.      Construir la base de la parte móvil

Lo primero será encolar y atornillar un listón largo a tres patas, igual que hicimos anteriormente. Lo sujetaremos con cinta de carrocero a la estructura de la parte fija.

Para dejar la estructura base terminada lo único que nos queda por hacer es colocar en su sitio el listón largo con los rebajes y sujetar con cinta de carrocero.

7.      Atornillar las lamas en su sitio

El paso final consiste en atornillar las lamas de madera a la estructura. Recuerda que las lamas móviles son las que tienen los extremos lijados, que deben quedar mirando hacia abajo.

Empezaremos con la lama móvil en uno de los extremos. La colocamos en su sitio y con 2 tornillos en cada extremo la fijamos a la estructura móvil.

A continuación colocamos una lama en vertical para calcular el hueco, y pegada a esta una lama fija. Atornillamos la lama a la estructura fija, retiramos la lama vertical, y repetimos el proceso. Si lo hemos medido y calculado todo bien, en el otro extremo nos deberá quedar otra lama móvil.

Presta mucha atención a dónde colocas los tornillos, ya que no van todos en línea; como es evidente, las lamas móviles van atornilladas a la estructura móvil y las lamas fijas a la estructura fija.

Por último, recuerda que si cuando hiciste los cálculos los huecos no cuadraban a la perfección, al llegar a las últimas lamas, no sigas utilizando el truco de la lama vertical, simplemente reajusta el espacio entre lamas para que encajen bien.

8.      Retoques finales

Con esto ya estaría hecha la cama con somier extensible, ahora solo quedaría tapar las vetas de la madera con masilla y, si queremos, pintarla.

Como veis, para fabricar este tipo de camas se necesitan algunos conocimientos de bricolaje, y un poco de tiempo libre, pero el resultado sin duda merecerá la pena.

Hasta aquí la versión básica del somier extensible para furgoneta camper; a continuación os dejamos algunas alternativas de materiales y apoyos para que tengáis donde elegir, además de accesorios y opciones adicionales por si queréis subir un grado más el nivel.

Materiales alternativos para un somier extensible

Una de las ventajas de un proyecto de bricolaje como este es que se pueden reautilizar materiales que ya tengamos disponibles. Nosotros te proponemos dos alternativas a comprar la madera como tal, pero puedes echarle imaginación y utilizar otros elementos que tengas a mano.

  • Palets: si tienes acceso a palets, puedes desmontarlos y utilizar fácilmente los listones de madera para construir tu somier. Desmantelaremos los palets, eliminaremos los clavos, grapas, tornillos, etc. Lijaremos las maderas para quitar posibles astillas y si tenemos tiempo, y nos apetece, podemos barnizarlas.
  • Somieres: en el caso de que cuentes con dos somieres de lamas de madera del tamaño adecuado para tu furgoneta, puedes adaptarlos para convertirlos en una cama extensible. Para ello hay que cortar los extremos de los somieres con una radial y lijar los cantos. Si podemos poner algún tipo de plástico a modo de tapón embellecedor, todavía mejor. Contrapeamos las lamas, sacando las de uno de los somieres de los soportes plásticos y poniendo el larguero de este somier dentro del otro, volviendo a colocar los soportes plásticos. Una vez hecho esto, con dos maderas unimos los largueros metálicos y ya tenemos la estructura del nuevo somier.

Apoyos de una cama extensible en una furgoneta camper

En nuestro ejemplo proponíamos unas sencillas patas de madera en las esquinas. Sin embargo, es fácil sustituir estas por otras opciones que se adapten mejor a tus necesidades. Aquí tienes algunos ejemplos:

  • Usar las ruedas como apoyo: los pasos de rueda de la furgoneta se pueden cubrir con una estructura de madera hecha con tablones en la que se apoya el somier. Recuerda hacer las patas del otro lado exactamente de la misma altura.
  • Tablero de madera: en vez de utilizar patas para la parte fija, podemos utilizar un tablero de madera para que quede cerrado. Con un tablero fino se podría simplemente cubrir las patas, pero si ya tienes por casas un tablero (de espesor suficiente para que resista el peso) al que le quieres dar un uso, puedes aprovecharlo para colocarlo en sustitución de las patas. Esta opción es ideal si vamos a colocar cajones o cajas en la parte de abajo, ya que estas quedarán más protegidas y será más limpio visualmente.

Opciones adicionales y accesorios para un somier de lamas extensible

Las opciones son infinitas, pero aquí te dejamos algunas sugerencias para que personalices tu somier extensible todo lo que quieras y lo adaptes de la mejor manera posible a tu furgo y a tus preferencias.

No es necesario que toda a cama sea extensible. En algunas ocasiones nos puede resultar más útil que la parte de atrás sea fija y solo la mitad delantera sea extensible. En este caso nos quedará un sofá en forma de L durante el día, y además dispondremos de más espacio de almacenaje debajo de la parte fija.

Si no necesitas una cama tan grande, pero te gustaría que fuera algo más ancha que un sofá, tienes la opción de hacer un somier semi extensible. Con esto queremos decir que la parte móvil puede ser más estrecha que la parte fija, no tiene por qué llegar hasta atrás del todo. Así tendrás un sofá con una profundidad bastante cómoda, digamos 85 cm, y una cama algo más espaciosa, por ejemplo 1.2 m

Lo más habitual es que utilices el espacio debajo del sofá como almacenaje, aunque no siempre es fácil alcanzar la parte del fondo. Una buena solución para este caso es construir tu somier con bisagras para poder levantarlo y acceder fácilmente a la zona inferior. Si ya queremos rizar el rizo podemos poner unos amortiguadores hidráulicos -como los de los maleteros de los coches- para que cuando abramos el canapé este se sostenga.

Ventajas de las camas con somier extensible

  • Se aprovecha muy bien el espacio de la furgoneta cuando la cama está plegada.
  • Se puede usar como sofá cuando no estamos durmiendo.
  • Se puede hacer con materiales que se pueden conseguir fácilmente.

Inconvenientes de las camas con somier extensible

  • No es que sea tecnología de la NASA, pero la construcción tiene su complejidad y nos llevará un buen rato.
  • Al tener partes móviles hay que darle mimo, habrá que repasar cada cierto tiempo las uniones y chequear que todo esté bien para evitar que se rompa en el peor momento.
  • Aprovechamiento del espacio cuando está abierta la cama. Al abrirla, la cama ocupa un plano longitudinal y, a diferencia de las camas tipo litera que ocupan espacio a lo alto, este tipo de somieres lo ocupan a lo ancho. Si llevamos equipaje en abundancia o material deportivo hay que tenerlo en cuenta.

¿Es una cama extensible la mejor opción para mí?

Las camas con somier extensible tienen muchas ventajas, como ya hemos visto, aunque tendrás que considerar más factores antes de decidirte por este formato.

Un somier extensible será la opción perfecta para nosotros si:

  • Viajamos solos, pero ocasionalmente podemos dormir acompañados.
  • No llevamos equipo de gran volumen o tenemos sitio adicional para este.
  • Viajas con tu pareja, pero no lleváis mucho equipaje; es la mejor opción, ya que tendréis un cómodo sofá por el día y una cama de gran tamaño por la noche.

Sin embargo, habrá casos en los que otros formatos de cama serán más recomendables. En las siguientes situaciones no recomendamos la cama extensible como opción predilecta:

  • Cuando viajas con material deportivo voluminoso como una bici o una tabla de surf y al abrir la cama no te cabe. Siempre lo puedes dejar fuera, pero corres el riesgo de robo, vandalismo, etc.
  • Cuando tu furgoneta camper es muy grande y no necesitas que la cama sea extensible. En este caso no es exactamente que no lo recomendemos, sencillamente es que puede que no te sea necesario y no merezca la pena invertir tiempo y dinero.
  • Si viajas siempre solo y no tienes intención o perspectiva de que eso cambie. En estos casos una cama plegable o abatible puede ser mejor solución.

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